Probablemente ya os habreís dado cuenta de que el amarillo es el color de tendencia de esta primavera-verano 2018. Este color brillante está dedicado a la Generación Z (también llamada Centennials) que son aquellos nacidos al principio del nuevo milenio. La principal característica de esta generación es el amplio uso de Internet y redes sociales, y los emoticons cson su símbolo. El amarillo de los emoticons es el amarillo Gen-Z Yellow.
Photos by Alexander Kent
Este tono de amarillo se encuentra entre el amarillo mostaza y el amarillo limón. Es un color brillante y cálido que simboliza la vitalidad y la ambición y es fácil de usar también en interiores y para los muebles.
Vemos muchas marcas que eligen el amarillo para sus colecciones de muebles y accesorios, y el amarillo también se usa mucho en la decoración de tiendas y restaurantes.
Yo no soy muy fan del amarillo (no sé porque), pero es cierto que el amarillo puede generar una sensación de optimismo dentro de una casa creando un ambiente alegre y una atmósfera enérgica.
Si os gusta el amarillo, podeís pensar en pintar toda una habitación, solo una pared o incluso una puerta. Sí os atreviis, podeís elegir una cocina amarilla o una nevera amarilla. Si se combina con blanco, el amarillo será brillante y alegre. Si se combina con colores más oscuros, el contraste creará una combinación muy interesante y llamativa.
O podeís comprar una pieza importante como, por ejemplo, un sofá amarillo. Me encanta la combinación del amarillo con gris o con azul: el amarillo es capaz de calentar estos tonos fríos.
Si no estaís tan seguros de amarillo, podeís añadir algunos toques de amarillo en los accesorios, como los cojines del sofá, una lámpara o una pequeña silla. El amarillo combina bien con colores como el rosa empolvado o el azul claro o también con colores brillantes como el fucsia.
¿Listos para introducir un poco de amarillo Gen-Z en casa?
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